Pero hijo mío, ¿tú que haces en el hospital?
Esta pregunta era un clásico de mi madre los primeros años de mi andadura profesional. Quizá por ello empecé a darme cuenta de que como colectivo profesional teníamos un problema de visibilidad, porque ni mi madre, ni nadie más conocido, sabía lo que hacíamos. Pero también me sirvió para darme cuenta de que teníamos otro problema.
Hacemos tantas cosas dentro de un hospital, y tan diferentes unas de otras, que cuando nos ponemos a contar lo que hacemos, como hacía yo con mi madre, soltamos unas chapas interminables, llenas de tecnicismos, que poca gente llega a entender de verdad. Aún recuerdo a mi madre diciendo: “¡¡Qué listo eres hijo mío!!, pero no entiendo nada”.
Un elevator pitch, o elevator speech, es un anglicismo que se utiliza para presentar un proyecto ante potenciales clientes o inversores, para captar su atención y poder presentarlo posteriormente con más detalle. Su nombre deriva de que se asemeja al viaje en un ascensor, que no dura más de 30 segundos. Entras en un ascensor y allí te topas con ese posible inversor. Se cierran las puertas, es tu oportunidad, comienza la cuenta atrás de 30 segundos. ¿Qué le dirías?
Aunque a título personal podemos intentar escribir uno, creo que debe ser nuestra sociedad científica quien lo desarrolle, de forma consensuada y con especialistas en el tema. Si luego nos lo aprendiéramos todos, y lo usáramos, tendríamos mucho ganado. Y si, además, se desarrollan con posterioridad los específicos para cada área asistencial, podríamos contar a quien fuera lo que hacemos. Desde el o la gerente, hasta a mi madre.
Me comprometo a desarrollar este proyecto desde la SEFH a partir de octubre de 2023.
Y tú, ¿tienes escrito y te sabes tu elevator pitch?
Faltan 269 días.
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Pero hijo mío, ¿tú que haces en el hospital?
Esta pregunta era un clásico de mi madre los primeros años de mi andadura profesional. Quizá por ello empecé a darme cuenta de que como colectivo profesional teníamos un problema de visibilidad, porque ni mi madre, ni nadie más conocido, sabía lo que hacíamos. Pero también me sirvió para darme cuenta de que teníamos otro problema.
Hacemos tantas cosas dentro de un hospital, y tan diferentes unas de otras, que cuando nos ponemos a contar lo que hacemos, como hacía yo con mi madre, soltamos unas chapas interminables, llenas de tecnicismos, que poca gente llega a entender de verdad. Aún recuerdo a mi madre diciendo: “¡¡Qué listo eres hijo mío!!, pero no entiendo nada”.
Un elevator pitch, o elevator speech, es un anglicismo que se utiliza para presentar un proyecto ante potenciales clientes o inversores, para captar su atención y poder presentarlo posteriormente con más detalle. Su nombre deriva de que se asemeja al viaje en un ascensor, que no dura más de 30 segundos. Entras en un ascensor y allí te topas con ese posible inversor. Se cierran las puertas, es tu oportunidad, comienza la cuenta atrás de 30 segundos. ¿Qué le dirías?
Aunque a título personal podemos intentar escribir uno, creo que debe ser nuestra sociedad científica quien lo desarrolle, de forma consensuada y con especialistas en el tema. Si luego nos lo aprendiéramos todos, y lo usáramos, tendríamos mucho ganado. Y si, además, se desarrollan con posterioridad los específicos para cada área asistencial, podríamos contar a quien fuera lo que hacemos. Desde el o la gerente, hasta a mi madre.
Me comprometo a desarrollar este proyecto desde la SEFH a partir de octubre de 2023.
Y tú, ¿tienes escrito y te sabes tu elevator pitch?
Faltan 269 días.