El otro día vi en Instagram una imagen con un texto que hablaba sobre las personas mágicas, y decía:

«Las personas mágicas existen. Aparecen de la nada. Son aquellas que saben ganarse la confianza rápido y de forma inesperada. De pronto un día llegan a tu vida, empiezan a hablar de todo, de alegría, daños, experiencias, penas y heridas.

Cuando te das cuenta, no recuerdas cómo era tu vida antes de que las conocieras. Así son las personas mágicas.

Y allí están, llegan a tu universo para darte un aire más liviano, para brindarte su amistad, su mano y elevar su energía juntos. Llegan para abrazarte, y muchas veces, para quedarse.»

Me pareció precioso, porque además creo que es cierto, pues en realidad, sé que existen.

Mi duda es si las personas mágicas, lo son en combinaciones determinadas, o lo son en general para mucha gente, aunque estoy casi seguro que es la primera opción, ya que pienso que la magia está en los ojos de quien mira a la otra persona, y cuando ambas miradas vibran acompasadas, aún sin verse, la magia se manifiesta.

Las personas mágicas en parte me recuerdan a las meigas, que «haberlas haylas», pero no las busques activamente que no aparecen así, sino por arte de magia.

Bendita magia.

Y tú, ¿crees en las personas mágicas?

Faltan 100 días.

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El otro día vi en Instagram una imagen con un texto que hablaba sobre las personas mágicas, y decía:

«Las personas mágicas existen. Aparecen de la nada. Son aquellas que saben ganarse la confianza rápido y de forma inesperada. De pronto un día llegan a tu vida, empiezan a hablar de todo, de alegría, daños, experiencias, penas y heridas.

Cuando te das cuenta, no recuerdas cómo era tu vida antes de que las conocieras. Así son las personas mágicas.

Y allí están, llegan a tu universo para darte un aire más liviano, para brindarte su amistad, su mano y elevar su energía juntos. Llegan para abrazarte, y muchas veces, para quedarse.»

Me pareció precioso, porque además creo que es cierto, pues en realidad, sé que existen.

Mi duda es si las personas mágicas, lo son en combinaciones determinadas, o lo son en general para mucha gente, aunque estoy casi seguro que es la primera opción, ya que pienso que la magia está en los ojos de quien mira a la otra persona, y cuando ambas miradas vibran acompasadas, aún sin verse, la magia se manifiesta.

Las personas mágicas en parte me recuerdan a las meigas, que «haberlas haylas», pero no las busques activamente que no aparecen así, sino por arte de magia.

Bendita magia.

Y tú, ¿crees en las personas mágicas?

Faltan 100 días.

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