Cuando te gusta y lees mucho sobre el mundo de la productividad personal, siempre aparece la misma pregunta, ¿cuál es la aplicación o software mágico que me va a dotar de superpoderes productivos?

Y la respuesta es simple, ninguno. Al menos a día de hoy, y que yo conozca.

Te puedo asegurar que he probado muchos, y no lo he encontrado. Los hay que me gustan más o menos, con más o menos funcionalidades y precios, pero ninguno es la respuesta en sí mismo, si no existe otra cosa de base.

Estoy convencido de que, para ser productivo, en cualquier ámbito, hay que adoptar un sistema de productividad, sea uno de los conocidos, sea uno adaptado por uno o una misma, que se ajuste mejor a la forma de ser propia.

Este es el gran secreto, tener tu sistema adoptado, y luego, ya usas unas u otras aplicaciones o software que mejor le apliquen y ayuden a conseguir que funcione bien. Y no es necesario que haya un único software, puede haber varios si el resultado conjunto es satisfactorio.

Pero si no lo tienes, tan solo volarás de flor en flor, como abeja trabajadora, desperdiciando tiempo y energía, sin terminar de encontrar algo que funcione de verdad para ti.

Y tú, ¿tienes definido tu proceso de productividad personal?

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