Conseguir la visibilidad a gran escala es una dura batalla, lo reconozco, quizá por eso le dé miedo a tanta gente. Y es que no deja de ser una contienda desigual frente a un enorme ejército de indiferencia, apatía y desapego.

A veces, este escenario me recuerda a Esparta.

Los espartanos, famosos por su valentía y disciplina, fueron un ejército formidable y temido en la antigua Grecia, que lograban vencer a fuerzas enemigas muy superiores en número. Varias fueron las razones de su éxito.

Eran un ejército altamente coordinado y capaz de maniobrar con rapidez en el campo de batalla, gracias a su riguroso entrenamiento desde la infancia, en el que adquirían destreza en artes marciales, manejo de armamento y tácticas militares.

Eran conocidos por su disciplina y su sentido de honor, lo que les llevaba a luchar con valor y persistencia hasta el final.

La formación en falange, donde los soldados estaban estrechamente dispuestos y se protegían entre sí con sus escudos, fue una parte clave de su estrategia militar, ya que les permitía resistir la embestida del enemigo y, al mismo tiempo, infligir daño de manera efectiva.

Y destacaban por ser capaces de sorprender al enemigo con tácticas de ataque rápidas y audaces.

Salvando todas las distancias del mundo, tanto en «La red de portavoces de la SEFH» como en el proyecto «Llámalo X«, veo potencial de aplicación de muchas de las virtudes de Esparta, con la diferencia de que aquí, en realidad, nunca eres derrotado, porque toda acción suma.

Y a ti, ¿te gusta el modelo espartano para aplicar en las batallas para conseguir visibilidad?

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