Hoy ha sido una mañana bonita.
Hemos tenido el acto formal de entrega de la acreditación de la Norma Internacional ISO 9001-2015, que ha recibido la Unidad de Terapias Avanzadas del Servicio de Farmacia del Hospital Universitari y Politècnic La Fe, por su Sistema de Gestión de Calidad, que detalla cómo es la gestión integral de la Unidad y de los procesos que en ella se desarrollan: adquisición, recepción, conservación, custodia, y dispensación de las terapias avanzadas.
Ha habido quien me ha preguntado, de forma previa, que por qué hacíamos este acto, cuando ya hace varias semanas que disponemos de la versión digital de la acreditación, la cual, además, ya está expuesta en el panel de acreditaciones del hospital, e incluso hubo nota de prensa oficial del Hospital y publicaciones en redes sociales.
Pues como responsable actual del Servicio de Farmacia, en mi opinión, hay dos motivos que justifican plenamente este evento.
El primero, darle la importancia que tiene y merece.
A día de hoy, pocos son, diría que solo dos, pero no quiero meter la pata, los Servicios de Farmacia de España que disponen de este proceso como propio e interno, y de ellos, este es el único con esta acreditación, por el momento.
Esta circunstancia considero que es importante, y que hay oficializarla como se merece.
Esta Unidad inició su actividad asistencial en 2020 con la gestión logística de los medicamentos CAR-T (Chimeric Antigen Receptor-T Cell), y ha ido incorporando la gestión de otras terapias avanzadas comerciales como darvadstrocel, células mesenquimales como uso compasivo, o terapias génicas. En la actualidad, esta unidad abarca la gestión logística de 7 terapias comercializadas y 7 terapias en investigación, traduciéndose hasta la fecha en 110 tratamientos individualizados por paciente.
Además, aunque acreditar este proceso era factible, sobre todo contando con la profesionalidad de mis compañeros Hugo Ribes y Mª José Ruiz, junto con el asesoramiento de Esther Arasa, la realidad es que había que hacerlo, había que trabajarlo y había que conseguirlo. Por ello, se lo agradezco a los tres.
En el ámbito del medicamento, las características de las Terapias Avanzadas y la trascendencia de sus resultados hacen que la exigencia de calidad en su gestión sea un principio incuestionable en los aspectos legales, éticos y metodológicos. Además, esta certificación refuerza el papel de Servicio de Farmacia en la gestión de las Terapias Avanzadas, recogida en el Plan de abordaje de las Terapias Avanzadas en el Sistema Nacional de Salud.
Y el segundo motivo, es que supone un camino a seguir.
Hace no mucho tiempo, alguien me enseñó una acreditación similar a esta, de un Servicio de Farmacia completo. Sin duda, ese sería un camino posible, pero no creo que sea el que nosotros tenemos que recorrer.
Esta certificación que hoy nos ocupa supone estandarizar la actividad, reducir la variabilidad, definir los mecanismos para la gestión de los riesgos, evaluar el desempeño y la monitorización de los resultados, y establecer y controlar las necesidades estructurales y de equipamiento, así como de la competencia de los profesionales.
En definitiva, supone la búsqueda de la mejora continua.
Así, nuestra naturaleza, nuestro volumen y nuestra complejidad, hace que considere mucho más beneficioso para el Servicio, y por ende para el Hospital y nuestros pacientes, la acreditación de las diferentes unidades y procesos por separado, con un enfoque más profundo y detallado, para llegar en un futuro, a través del desarrollo conjunto previo, a una acreditación global.
Por tanto, este es el punto de inicio de nuevos caminos, como en su día fue la acreditación similar de la Unidad de Ensayos Clínicos del Servicio.
Uno de estos caminos, es, sin duda, iniciar la acreditación del sistema de calidad de la Unidad de Farmacocinética y Farmacogenética. Sus características innatas y su razón de ser, la hacen una perfecta candidata para ello.
Pero hay otro camino que me gustaría empezar lo antes posible. Uno que, además, tendrá que marcar el camino a seguir por otros en el futuro.
Me refiero al primer proceso asistencial transversal que recientemente hemos puesto en el Servicio de Farmacia. Me refiero al “Proceso asistencial transversal en enfermedades raras”. Su consecución marcará el camino a seguir por los futuros procesos asistenciales transversales que pongamos en marcha.
Pues eso, que hoy ha sido una mañana bonita.
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Hoy ha sido una mañana bonita.
Hemos tenido el acto formal de entrega de la acreditación de la Norma Internacional ISO 9001-2015, que ha recibido la Unidad de Terapias Avanzadas del Servicio de Farmacia del Hospital Universitari y Politècnic La Fe, por su Sistema de Gestión de Calidad, que detalla cómo es la gestión integral de la Unidad y de los procesos que en ella se desarrollan: adquisición, recepción, conservación, custodia, y dispensación de las terapias avanzadas.
Ha habido quien me ha preguntado, de forma previa, que por qué hacíamos este acto, cuando ya hace varias semanas que disponemos de la versión digital de la acreditación, la cual, además, ya está expuesta en el panel de acreditaciones del hospital, e incluso hubo nota de prensa oficial del Hospital y publicaciones en redes sociales.
Pues como responsable actual del Servicio de Farmacia, en mi opinión, hay dos motivos que justifican plenamente este evento.
El primero, darle la importancia que tiene y merece.
A día de hoy, pocos son, diría que solo dos, pero no quiero meter la pata, los Servicios de Farmacia de España que disponen de este proceso como propio e interno, y de ellos, este es el único con esta acreditación, por el momento.
Esta circunstancia considero que es importante, y que hay oficializarla como se merece.
Esta Unidad inició su actividad asistencial en 2020 con la gestión logística de los medicamentos CAR-T (Chimeric Antigen Receptor-T Cell), y ha ido incorporando la gestión de otras terapias avanzadas comerciales como darvadstrocel, células mesenquimales como uso compasivo, o terapias génicas. En la actualidad, esta unidad abarca la gestión logística de 7 terapias comercializadas y 7 terapias en investigación, traduciéndose hasta la fecha en 110 tratamientos individualizados por paciente.
Además, aunque acreditar este proceso era factible, sobre todo contando con la profesionalidad de mis compañeros Hugo Ribes y Mª José Ruiz, junto con el asesoramiento de Esther Arasa, la realidad es que había que hacerlo, había que trabajarlo y había que conseguirlo. Por ello, se lo agradezco a los tres.
En el ámbito del medicamento, las características de las Terapias Avanzadas y la trascendencia de sus resultados hacen que la exigencia de calidad en su gestión sea un principio incuestionable en los aspectos legales, éticos y metodológicos. Además, esta certificación refuerza el papel de Servicio de Farmacia en la gestión de las Terapias Avanzadas, recogida en el Plan de abordaje de las Terapias Avanzadas en el Sistema Nacional de Salud.
Y el segundo motivo, es que supone un camino a seguir.
Hace no mucho tiempo, alguien me enseñó una acreditación similar a esta, de un Servicio de Farmacia completo. Sin duda, ese sería un camino posible, pero no creo que sea el que nosotros tenemos que recorrer.
Esta certificación que hoy nos ocupa supone estandarizar la actividad, reducir la variabilidad, definir los mecanismos para la gestión de los riesgos, evaluar el desempeño y la monitorización de los resultados, y establecer y controlar las necesidades estructurales y de equipamiento, así como de la competencia de los profesionales.
En definitiva, supone la búsqueda de la mejora continua.
Así, nuestra naturaleza, nuestro volumen y nuestra complejidad, hace que considere mucho más beneficioso para el Servicio, y por ende para el Hospital y nuestros pacientes, la acreditación de las diferentes unidades y procesos por separado, con un enfoque más profundo y detallado, para llegar en un futuro, a través del desarrollo conjunto previo, a una acreditación global.
Por tanto, este es el punto de inicio de nuevos caminos, como en su día fue la acreditación similar de la Unidad de Ensayos Clínicos del Servicio.
Uno de estos caminos, es, sin duda, iniciar la acreditación del sistema de calidad de la Unidad de Farmacocinética y Farmacogenética. Sus características innatas y su razón de ser, la hacen una perfecta candidata para ello.
Pero hay otro camino que me gustaría empezar lo antes posible. Uno que, además, tendrá que marcar el camino a seguir por otros en el futuro.
Me refiero al primer proceso asistencial transversal que recientemente hemos puesto en el Servicio de Farmacia. Me refiero al “Proceso asistencial transversal en enfermedades raras”. Su consecución marcará el camino a seguir por los futuros procesos asistenciales transversales que pongamos en marcha.
Pues eso, que hoy ha sido una mañana bonita.